La amigdalitis es la inflamación de las amígdalas palatinas, las cuales son unas masas de un tejido especial ubicado a los lados de la faringe. Además, su función es defender al organismo contra los gérmenes. Asimismo, la función de las amígdalas es de gran importante especialmente en los primeros años de vida. No obstante, en la etapa adulta van perdiendo actividad y progresivamente se van atrofiando.
Causas de la amigdalitis
La causa más común de amigdalitis son las infecciones víricas, estas se presentan por lo general antes de los 3 años de edad. También la amigdalitis puede ser provocada por bacterias como el estreptococo, siendo este, el más común. Así pues, la gravedad y los síntomas difieren en función del germen causante de la afección.
Cuando la infección es provocada por un virus ocasiona inflamación con dolor de garganta, tos, febrícula, voz gangosa y malestar general semejante a un resfriado. Por otro lado, cuando la amigdalitis es de origen bacteriano la fiebre es más alta, el dolor y el malestar general son mucho más fuerte.
Síntomas de la amigdalitis
Los síntomas más frecuentes de la amigdalitis son:
- Ganglios inflamados
- Congestión nasal
- Ulceraciones
- Placas blancas o amarillas en las amígdalas
- Dificultad para tragar
- Dolor de garganta
- Tos
- Escalofríos y fiebre
- Dolor de oídos, en los ojos y de cabeza
- Sensibilidad en la mandíbula y en la garganta.
Cómo prevenir la amigdalitis
Para prevenir la transmisión de virus y bacterias responsables de la amigdalitis es necesario tener en cuenta las recomendaciones siguientes:
- Lavar las manos antes de comer y sobre todo después de ir al baño.
- Mantener la distancia con personas que puedan estar infectadas, especialmente cuando tosan o estornuden.
- Evitar compartir utensilios, vasos y alimentos.
- Estornudar y toser cubriendo la boca con un pañuelo o usando el codo.
- Ventilar con frecuencia los lugares muy concurridos como locales de ocio, oficinas, escuelas, etc.
- Utilizar pañuelos desechables.
Tratamiento para la amigdalitis
Según los especialistas el tratamiento para la amigdalitis variará según sea la causa que la produzca. No obstante, la mayoría de las veces únicamente será necesario usar un tratamiento para mejorar los síntomas. Sin embargo, en otros casos se requerirá de un tratamiento con antibióticos.
En línea general, aquellos casos de amigdalitis producidos por virus o de origen bacteriano leves, solo bastará con el uso de un tratamiento sintomático. Esto incluye, antiinflamatorio y analgésicos acompañados del consumo de abundante agua. Por otro lado, las amigdalitis bacterianas más graves necesitarán tratamientos con antibióticos durante 8 a 10 días.
Otro tratamiento para la amigdalitis pero más radical, es la amigdalectomía esta se trata, de la extirpación de las amígdalas palatinas. Sin embargo, los otorrinolaringólogos prefieren evitar este tipo de cirugía, excepto en aquellos casos muy graves donde el paciente presente más de seis episodios en un año.
Es muy importante recordar que no es recomendable automedicarse, ya que una dosis de medicamento inapropiada, puede generar consecuencias graves en la salud del paciente. Por tanto, se recomienda acudir al médico para que este indique la dosis correcta, la frecuencia y el tiempo preciso del tratamiento. De esta manera, estarás evitando que la resistencia de las bacterias a los antibióticos aumente.