La piel es el órgano más visible, por tanto, está más expuesto a las agresiones del medio ambiente. Además, a veces pareciera que el cuidado de la piel se tratase solo de estética y la realidad es otra, ya que el órgano más grande del cuerpo requiere de cuidados para poder defendernos de los daños externos, como la polución. A continuación, hablaremos de porqué es importante cuidarla.
¿Por qué es importante el cuidado de la piel?
Es importante, porque la piel protege todo el cuerpo y es indispensable tenerla sana para poder tener la temperatura adecuada. Sin ella no tendríamos uno de los 5 sentidos como lo es el del tacto. Además, al tener controlada la temperatura, evitamos la deshidratación e impedimos el paso de agentes bacterianos, virales, radiaciones, toxinas, y alérgenos a nuestro interior.
Por otro lado la piel está fuertemente vinculada al sistema inmunitario y nervioso. Por esta razón, su condición puede ejercer un impacto importante sobre la autoestima. Ya que a través de la piel sentimos, recibimos estímulos y nos conectamos con otros. Incluso en nuestro organismo tenemos hormonas que se reducen en la piel, debido a una función endocrina.
La importancia de conocer la piel
Es necesario conocer el tipo de piel que tenemos, ya que esto puede ayudar a la hora de aplicar un producto para el correcto cuidado. Por tanto, no es bueno usar una crema para pieles secas si tu piel es grasa, porque este hecho, puede desregular el pH de tu piel. Así pues, provocarías una complicación para sanearla.
- Piel sensible: Cuando la piel es muy sensible requiere de un cuidado específico. Así que debes usar cremas específicamente para pieles delicadas.
- Piel mixta: Lo mejor en este caso es localizar qué parte de tu cuerpo es seca y cuál es grasosa. En este caso tienes dos opciones, escoger la clase de producto específico para cada área o elegir una crema bastante inocua que no altere tu pH. Al mismo tiempo, que te hidrate lo suficiente sin provocar más grasa.
- Piel grasa: La sensación aceitosa de este tipo de piel es desesperante. Sin embargo, al usar productos específicos se puede ir regulando el exceso de sebo.
- Piel seca: Este es un tipo de piel con tendencia a la deshidratación. Por tanto, se requiere controlar el agua de tu piel y así lucir una piel radiante. Para ello, es recomendable usar diariamente una crema hidratante.
Limpieza, la base para el cuidado de la piel
Uses lo que uses si no mantienes una adecuada limpieza en la piel, la suciedad acabará haciendo mucho daño. De manera que debes desmaquillarte antes de dormir, esto es necesario para que la piel respire. Después usa un tónico para regular el pH, sin olvidar que a la mañana siguiente también debes limpiar y tonificar la piel.
Finalmente, la clave para que todo funcione bien, es que sin importar el tipo piel que tengas, no debes olvidar que hay una rutina a la que no deberías escapar. Debido a que es indispensable para que tengas el cuidado de piel necesaria y esta permanezca bien reluciente.