La simplificación de los trámites para acceder a ayudas y disponer de fondos para financiar proyectos empresariales son una realidad
El emprendimiento empresarial cada vez está más valorado. Existen verdaderos mecanismos que fomentan, no solo la puesta en marcha de proyectos, sino que también acompañan al equipo durante su andadura con la firme intención de que el despegue de la empresa tenga las máximas garantías de éxito.
Existen start up. Son aquellas empresas que utilizan las nuevas tecnologías y las fórmulas más novedosas de gestión que están proliferando con mucha rapidez. En ese sentido, lo más importante para poder llevar a cabo este tipo de iniciativas es, precisamente, la financiación.
Por todo ello, es preciso tener entidades como Wannacash que dispongan de líneas de financiación. No obstante, las alternativas público-privadas suelen ser las que suelen desembocar en mayor éxito.
En esa línea, el Gobierno dispone de una serie de herramientas para facilitar el acceso de los nuevos empresarios y de los ya consolidados cuando quieren hacer una ampliación de servicios o explorar nuevos campos empresariales. La generación de riqueza es una cuestión esencial para el desarrollo de la sociedad, por tanto, el sector público y el privado han de entenderse para sacar el máximo provecho.
La Ley Start Up es un gran revulsivo al emprendimiento
En diciembre de 2021 el Gobierno de España anunciaba en lo que consistía la nueva Ley Start Up (Crea y Crece) con la que se pretende, en su amplitud de miras, fomentar el emprendimiento de proyectos innovadores, a través de la simplificación administrativa. Dentro de esa ley se contemplan fondos europeos como el Next-Tech con una dotación de más de 4.000 millones de euros que quieren ser un revulsivo para las nuevas compañías, pero también para la modernización de los mercados.
Sin embargo, toda esa batería propuesta por el Gobierno tiene que venir de la mano de otras campañas de financiación para emprendedores por parte de entidades privadas y que los empresarios y empresarias encuentren, en cada momento, las líneas de financiarse más adecuadas.
Además, la Empresa Nacional de Innovación (ENISA), dispondrá todas las herramientas financieras, las ventajas de sus costes cero, los años de carencia y los préstamos sin avalistas que siempre son un revulsivo importante para los emprendedores.
Hay que tener en cuenta que el Gobierno Central contempla como Start Up que puedan acogerse a todas las bondades de la Ley Crea y Crece a aquellas que se hayan constituido hasta cinco años atrás, siete en el caso de las de biotecnología, y que no facturen más de cinco millones de euros.
Por tanto, se amplían todas las ventajas, incluso con carácter retroactivo. También se reduce el tipo impositivo en los impuestos de sociedades y de la renta. Además, se elimina la doble cotización durante tres años de aquellos emprendedores que, además, trabajan por cuenta ajena.
La importancia de las infraestructuras
Para emprender se debe contar, en primer lugar, la certeza de que al hacerlo se tendrán todas las herramientas a disposición para que la inversión se revierta en beneficios.
En este caso, los transportes, las comunicaciones, las infraestructuras de conexión son esenciales para desarrollar proyectos solventes. En ese sentido, para robustecer esa Ley del Emprendimiento, además de las líneas de financiación, también se ha puesto sobre la mesa un compromiso por parte del Ministerio de Transporte, Movilidad y Agenda Urbana con el deseo de que la conexión entre territorios, puertos, aeropuertos y plataformas logísticas se eleve a la excelencia.
En definitiva, una batería de propuestas muy interesantes que hacen que el hecho de emprender sea más atractivo y que cada vez se facilite, aún más, la formalización de este tipo de proyectos que generan riqueza y empleo de calidad. España por su situación geoestratégica, por su buen acceso marítimo, terrestre y aéreo se convierte en un solar especial para aquellos que quieren emprender y generar empresas sostenibles, modernas y a la vanguardia tecnológica.